Nuestro proyecto educativo quiere responder a los múltiples desafíos que impone la sociedad actual y las exigencias de nuestra época, formando personas autónomas con responsabilidad cívica, ecológica, ética y social.
Para lograr esto, la educación que se entrega a nuestros alumnos y alumnas, pretende formar estudiantes críticos de su entorno, con la capacidad de adaptación a cada realidad en la que se enfrenten. Fomentando el crecimiento personal y humano, desarrollando una educación integral y fortaleciendo sus capacidades. Abarcamos las distintas esferas de la persona humana: cognitivo, social, físico, afectivo y espiritual.
Somos un colegio católico, por lo tanto, nos regimos por los valores de nuestra fe y los valores universales de la honestidad, respeto, responsabilidad y solidaridad, los cuales son parte de nuestra esencia y formación. Por otra parte la inclusión y el respeto a todo tipo de credo y religión nos hace un colegio abierto a toda la comunidad y comprometido con ella.
Buscamos crear un fuerte lazo entre nuestra comunidad educativa y sus familias, brindado el apoyo y orientación para responder a las necesidades individuales tanto educativas como emocionales de nuestros estudiantes.
Estamos conscientes de los altos índices de vulnerabilidad de nuestros jóvenes y es por esto que queremos entregar todas las herramientas necesarias para que puedan en el futuro poner en práctica todo lo aprendido y lograr así la anhelada movilidad social.